Los escritores somos emprendedores, tenemos una idea de negocio (una novela, un relato, una poesía) y deseamos darla a conocer al mundo, que alguien financie nuestra obra y que la gente la compre. Un emprendedor hace y desea eso mismo y por ese motivo nos puede enseñar muchas cosas.
Llevo dos años acudiendo cada mes a unas reuniones de emprendedores que se realizan en Boadilla, la primera vez que fui tenía claro que quería escribir, pero no sabía cómo encaminar mi vida laboral.
Tras dos años en estos grupos he conocido a un montón de personas, he aprendido muchísimo y me he sorprendido de cuánta creatividad tiene la gente. Hay numerosos negocios que parten de ideas maravillosas para mejorar el mundo con un pequeño aporte.
También me ha sorprendido darme cuenta de que los escritores somos emprendedores y que además podemos aprender de ellos. Estas son las 5 cosas que un emprendedor puede enseñar a un escritor:
Búsqueda de ideas creativas
Un emprendedor piensa de forma distinta para encontrar ideas que solucionen problemas a las personas y que aporten algo nuevo. Absorber información, no parar de buscar y de experimentar.
Esto es lo mismo que debería hacer un escritor: observar el mundo con otros ojos, fijarse en los detalles, quedarse con partes de una conversación que escucha en el autobús, hacer experimentos con las letras y probar continuamente cosas nuevas.
Aprender de los fracasos
Hace tiempo que acudo a un evento para emprendedores que en el que en lugar de hablar de éxitos se habla de fracasos. Se llama “FuckUp NIgths” y se celebra cada dos meses en Madrid (hay más ciudades en las que se hace).
Cuando escuchas a los emprendedores hablar de sus fracasos te das cuenta de que lo que realmente importa es que tengamos la capacidad de aprender de los errores y de los aciertos. Un escritor puede escribir un relato que no es perfecto, pero a medida que vaya escribiendo sabrá evitar los mismos errores y escribir cada vez mejor.
Ser perseverante
La perseverancia es fundamental para cualquier escritor, porque en el camino surgen miles de dificultades que se deben superar día a día. Como escritores nos enfrentamos a muchos obstáculos también que solo podremos superar con perseverancia: rechazo de nuestros escritos por las editoriales, imposibilidad de encontrar financiación para editar nuestros libros y malas críticas, entre otros.
Vencer la soledad en el trabajo
Un escritor, como muchas veces un emprendedor, trabaja solo. La soledad es a veces esencial para conseguir concentrarse y escribir o trabajar en un proyecto emprendedor, pero llega un momento en el que necesitamos hablar con alguien.
Un emprendedor acude a reuniones de emprendedores, eventos de networking, cursos, talleres y toda clase de encuentros que le permitan estar en contacto con personas que tienen sus mismos problemas y con potenciales clientes.
El escritor puede hacer cosas parecidas y acudir a presentaciones de libros, ferias de libros, cursos de escritura e incluso eventos de emprendedores, para vencer esa soledad y conocer a otras personas en sus mismas circunstancias.
Aprender a venderse
Un emprendedor sabe que en cualquier momento le pueden presentar a un inversor y va a tener que presentar su proyecto en tres minutos para captar la atención. Por ese motivo, es preciso que prepare y se aprenda un discurso estructurado y preciso para vender su proyecto.
Eso es algo que también puede hacer un escritor a la hora de ofrecer su obra a un editor. Es preciso pensar en cómo llamar la atención y despertar interés para lograr provocar una reunión con el editor y presentarle nuestro proyecto.
Sentir pasión por lo que haces
Si hay un elemento fundamental que un escritor puede aprender de un emprendedor es la pasión por lo que hace. Un emprendedor sabe motivarse a sí mismo porque siente verdadera pasión por su proyecto.
Lo mismo debe ocurrir con un escritor, debe sentir auténtica pasión por lo que hace y disfrutar con cada letra que escriba, porque será precisamente esa pasión la que le impulse a seguir adelante y a superarse en la escritura.